PAPEL DE LA INDUSTRIA EL 23J

Propuestas electorales sobre la Industria

Más Industria ha llevado a cabo una exhaustiva evaluación de los programas electorales de los cuatro principales partidos políticos en el contexto de las próximas elecciones. Su objetivo ha sido identificar y destacar aquellos puntos que consideran más relevantes para el futuro de la industria y el desarrollo económico del país.

En este riguroso análisis, Más Industria ha examinado minuciosamente los programas de los partidos políticos, identificando sus propuestas, planes y enfoques en materia económica e industrial. Han destacado ciertos aspectos que podrían tener un impacto significativo en el crecimiento del sector productivo y en la generación de empleo a nivel nacional.

LOS CANDIDATOS A LA ALCALDÍA DE SEVILLA Y SUS PROGRAMAS INDUSTRIALES

Con las recientes elecciones municipales en Andalucía el domingo 28 de mayo de 2023 MÁS INDUSTRIA realiza un resumen principales partidos en su programas industriales.

PSOE
Antonio Muñoz
83/ Impulsar líneas de conservación y uso del patrimonio (histórico, industrial, de la exposición del 29) para la puesta en marcha de proyectos de carácter cultural y de servicios.
85/ Desarrollar un proyecto de equipamiento público en la Fábrica de Vidrio vinculado al patrimonio industrial, para el cual ya se cuenta con financiación europea.
96/ Impulsar la creación de una gran zona industrial en San Jerónimo, aprovechando la ubicación de La Agencia Espacial Española, la factoría de Renault, el Parque Torneo empresarial, la rehabilitadas Naves de Renfe y las necesidades de crecimiento del PCT Cartuja.
Previous slide
Next slide
PP
José Luis Sanz
El Plan VIVE es un modelo de éxito de colaboración público‐privada para aumentar el parque de vivienda asequibles en la región madrileña, en 6.000 viviendas, donde la Administración autonómica pone suelo a disposición de los operadores, que son los que invierten en la construcción y gestión de los inmuebles, y los madrileños se benefician de alquileres más bajos que los del mercado.
Una iniciativa regional que va a representar un cambio de paradigma en la edificación de obra nueva pública hacia la industrialización y la sostenibilidad.
Promover la simbiosis industrial y la localización de nuevas empresas, enfocadas con la transformación de residuos hacia subproductos, crear uno o varios polos de suelo para su localización, próximo al origen de los residuos y a las cadenas de transformación.
Previous slide
Next slide
55.‐ Racionalizar la red de autobuses de TUSSAM para conseguir mayor acceso en los barrios y favorecer el acceso del transporte público a polígonos industriales.
91‐Organizar la gestión de residuos en los polígonos industriales. Ubicar en ellos plantas de tratamiento mancomunadas y de transferencia entre las empresas del polígono.
123.‐ Mejorar las infraestructuras y la gestión de los polígonos industriales Elaborar en colaboración con las Universidades Públicas un Plan de Acción para la transición de las industrias y actividades económicas sevillanas a la Economía Circular. Revitalizar las infraestructuras (calles, asfaltados, iluminación, canalizaciones, comunicación…) de los polígonos industriales con un programa plurianual de inversiones.
124.‐ Apostar por la revitalización de los polígonos impulsando la puesta en marcha de las Entidades Urbanísticas de Conservación (EUC), revisando las deficiencias que arrastran. Para ello se debe destinar partidas presupuestarias específicas en los presupuestos municipales para la puesta en marcha de las EUC y elaborar un estudio desde LIPASAM para dar respuesta a las necesidades de estas zonas.
176‐ Fomentar la formación y el empleo en sectores estratégicos y emergentes para el proyecto de ciudad que proponemos como: la agroecología urbana y la industria agroalimentaria, la rehabilitación sostenible de edificios, las energías renovables, la gestión y recuperación de residuos en la minería urbana, la economía circular y los cuidados de proximidad.
241.‐ Aprovechar el potencial del patrimonio industrial Diseñar estrategias propias que incorporen el Patrimonio Industrial como un recurso activo para el desarrollo económico, cultural, territorial y social, implantando programas de innovación experimental.
Previous slide
Next slide
VOX
Cristina Peláez
Punto 7. Habla de “mejorar parques empresariales y potenciaremos la privilegiada situación geográfica de Sevilla para revitalizar nuestro puerto y potenciar la industria logística”.
Previous slide
Next slide
Ciudadanos
Miguel Ángel Aumesquet
Punto 94: Apoyaremos a nuestros emprendedores con información, tramitación de documentación, asesoramiento, formación y apoyo a la financiación empresarial. Potenciaremos en nuestro Ayuntamiento los Puntos de Asesoramiento a Emprendedores (PAE), con la firma del correspondiente Convenio con el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
Punto 98 Invertiremos en la modernización de los polígonos industriales de nuestro municipio. Nuestro objetivo será mejorar la competitividad y atraer nuevas empresas, flexibilizando los usos que permitan compatibilizar nuevas actividades propias de una economía de mercado global con las pymes y autónomos.
Punto 131 Impulsaremos Planes Industriales orientados al comercio internacional. Queremos consolidar la capacidad de nuestra ciudad para competir en mercados internacionales. Desde CS apostamos por la potenciación de empresas tecnológicas de alto valor añadido, favoreciendo el asentamiento de las mismas y la oportunidad de atraer y fomentar talento, especialmente entre los jóvenes.
Punto 161 Reduciremos los impuestos municipales de circulación a los vehículos pesados para potenciar polígonos industriales desaprovechados.
Previous slide
Next slide
Con Andalucía
Susana Hornillo
Elaborar en colaboración con las Universidades Públicas un Plan de Acción para la transición de las industrias y actividades económicas sevillanas a la Economía Circular.
Revitalizar las infraestructuras (calles, asfaltados, iluminación,canalizaciones, comunicación…) de los polígonos industriales con un programa plurianual de inversiones.
Aumentar la vigilancia en los polígonos industriales en colaboración con el Gobierno Central
Favorecer las instalaciones eólicas y fotovoltaicas de baja potencia, entre 10 y 100 kW, y muy baja potencia, inferior a 10 kW, en polígonos industriales donde exista el espacio suficiente para su implantación (también sobre cubiertas de naves, aparcamientos, etc.).
Una de las medidas imprescindibles en un escenario de cambio climático es fomentar la racionalización del consumo de agua, tanto entre los usuarios domésticos como en comercios, industrias y administraciones públicas.
Ampliar el número de servicios y la frecuencia de paso de las líneas que prestan servicio en los barrios periféricos de la ciudad, especialmente los sábados, domingos y festivos. Mejorar la conexión del transporte público con los polígonos industriales
Realizar un Plan Integral del patrimonio industrial en Sevilla dirigido al conocimiento y la activación de estos recursos culturales.
Plan de recuperación del patrimonio industrial y artesano del Casco Antiguo
Previous slide
Next slide

En general, las propuestas que en materia industrial realizadas por los partidos políticos que aspiran a tener concejales y alcalde en el Ayuntamiento de Sevilla son muy escasas y de bajo nivel. Aunque en campaña todos hablan de que hay que apoyar la industria y el desarrollo industrial, en los programas no aportan medidas de calado que puedan mejorar la industrialización del municipio.

CELEBRADA UNA REUNIÓN DE TRABAJO ENTRE EL SECRETARIO GENERAL DE INVESTIGACIÓN E INNOVACIÓN D. PABLO CORTÉS Y EL PRESIDENTE DE MÁS INDUSTRIA AURELIO AZAÑA

Se ha desarrollado una reunión entre D. Pablo Cortés y D. Aurelio Azaña con el objetivo de buscar colaboraciones entre ambas instituciones para fomentar la innovación entre las pymes industriales de Andalucía.

El presidente de MÁS INDUSTRIA explicó que una de las conclusiones del informe LA INDUSTRIA ANDALUZA. DIEZ TEMAS EN DIEZ AÑOS (realizado por ARENAL GRUPO CONSULTOR para MÁS INDUSTRIA ) se pone de manifiesto la baja tasa de inversión en innovación de la PYME industrial andaluza y la proporción tan irrelevante frente a las grandes empresas industriales. En el informe mencionado, el 95 % de las grandes empresas industriales andaluzas realizaron innovaciones tecnológicas en el año de referencia 2020 frente a un escaso 1,8 % de Pymes industriales de la región que invirtieron en innovación.

Por ello, se urgió a que en los nuevos marcos regulatorios de ayudas públicas a la I+D+i se fomente la innovación de pymes industriales aun sabiendo que dichas inversiones públicas pueden no tener éxito pues la innovación comporta riesgos que el empresario industrial debe asumir con el respaldo financiero y legal de la administración pública.

Presentación «La industria de Andalucía: diez temas en diez años»

Contar con un tejido industrial potente es fundamental para el desarrollo económico de regiones y países, tanto por los efectos directos que genera en el VAB (Valor añadido Bruto) y el empleo, como por los efectos inducidos que provoca en la producción de otros sectores, además de por la mejora que conlleva en la innovación, la productividad y la balanza comercial.

La industria es el motor de progreso de las regiones. Basta mirar un momento a nuestro alrededor para concluir que “sin industria no hay progreso para las sociedades modernas”.

MÁS INDUSTRIA, asociación cuyo objetivo es impulsar el desarrollo industrial y tecnológico de Andalucía, entiende que es imprescindible reflexionar sobre el estado de la industria andaluza, para a partir de las conclusiones que se alcancen en dicho proceso, formular medidas que aborden los retos del sector.

Por este motivo, ha promovido la realización del informe “La industria de Andalucía: diez temas en diez años”, de cuya elaboración se ha encargado ARENAL GRUPO CONSULTOR S.L y que se pondrá en fechas próximas a disposición de todos los agentes involucrados en el desarrollo de la industria en Andalucía.

En el informe se evalúa la situación y evolución de un amplio conjunto de cuestiones, tendencias e indicadores sobre la estructura, el comportamiento y los resultados de la industria andaluza en el periodo 2012-2022, que se han organizado en 10 temas fundamentales.

En cada uno de estos temas, además, se examina la posición de Andalucía respecto a las regiones españolas, determinándose su posición en la jerarquía y su “distancia” respecto a las regiones líderes en, por ejemplo, productividad, digitalización, creación de empresas o generación de valor.

A partir de las evidencias obtenidas se han alcanzado 27 conclusiones, que señalan las luces y sombras de la industria andaluza, los avances logrados en la última década y los retrocesos sufridos en algunos aspectos, lo que permite definir los retos de la Política Industrial para Andalucía en los próximos años.

Este informe servirá, igualmente, para proponer una serie de medidas como expertos en el sector industrial, para paliar las debilidades detectadas y afianzar las fortalezas industriales que tenemos en la región.

Todo ello con el ánimo de hacer de Andalucía la puerta industrial de Europa.

FALTA DE INCENTIVOS PÚBLICOS A LA INVERSIÓN ESTÁ PROVOCANDO UNA CAIDA DE AMPLIACIONES Y NUEVAS IMPLANTACIONES INDUSTRIALES

En la actualidad, son muy escasas las convocatorias para apoyar las nuevas inversiones industriales y las ampliaciones para proyectos industriales en Andalucía.

La guerra desatada entre Estados Unidos y Unión Europea por incentivar a la industria para que no se deslocalice (por un lado, USA con su ley de reducción de la inflación y EU con su apoyo a las energías y la descarbonización) hace presagiar una pugna entre ambas potencias para atraer a las grandes inversiones industriales y/o impedir su deslocalización.

Sin embargo, no hay que olvidar que el tejido industrial de Andalucía está liderado por pequeñas y medianas empresas que son a las que habría que ayudar.

No hay que tener muchas expectativas de que desde Bruselas se señale a Andalucía como receptor de esas empresas industriales (antes las derivarían a los países más industrializados de Europa como Alemania, Francia Holanda incluso Polonia). Desde Europa se nos ve más como una región orientada al sol y playa de los jubilados europeos que como una potencia industrial.

Tampoco tenemos que tener muchas expectativas para que el gobierno de la nación “oriente” a posibles grandes inversores a implantarse en la región, por consideraciones políticas de distinto signo y por el pago que el Gobierno tiene que hacer a sus socios catalanes y vascos que difícilmente van a permitir que un proyecto industrial de cierta consideración salga de sus fronteras.

 

Es el juego que se ha implantado en nuestros días entre los industriales globales y las administraciones públicas: el “y tú que me das de más para que me implante en tu región”; la subasta de proyectos entre las regiones que hacen que las autoridades públicas tengan que hacer lo más atractivo posible a sus emplazamientos. Son las reglas del juego; gustarán más o menos, pero eso es lo que hay.

 

La última convocatoria más o menos “potente” que elaboró la Junta de Andalucía para la industria fue el programa de subvenciones para el desarrollo industrial, la mejora de la competitividad, la transformación digital y la creación de empleo en Andalucía que estuvo activa hasta el año 2020 y que fue gestionada por la Agencia IDEA dependiente de la Consejería de Economía, Hacienda y fondos europeos. Desde entonces, nada nuevo.

 

De esta convocatoria, aparte de la dificultad para acceder a ellas, nos encontramos con la falta de operatividad en su gestión ya que hay bastantes solicitudes que no han sido todavía atendidas y de las que lo han hecho, una parte de ellas todavía no han recibido los fondos.

 

 Por otro lado, las regiones y países limítrofes a Andalucía llevan varios años atrayendo inversiones industriales y ayudando al desarrollo de las existentes.

 

Extremadura ha sacado su convocatoria de incentivos a la inversión empresarial para aquellos proyectos que se implanten en esa región y gestionados de una forma ágil y con garantía y seguridad jurídica. Este programa se extenderá desde el 26 de enero de 2023 hasta el 31 de Diciembre de 2026.

 

Nuestro país vecino con el que compartimos frontera (Portugal) es otro ejemplo, a nuestro entender, de modelo de éxito. También ha concebido un programa muy ambicioso de apoyo a las inversiones industriales que daría para escribir un artículo entero.

 

También en materia de energía están cerradas las convocatorias de la Junta que tan bien ha gestionado el organismo adscrito a la Consejería de política industrial y energía que es la Agencia Andaluza de la Energía.

 

Por último, los fondos next generation gestionados por el gobierno de la nación y que, de momento, tan escasos resultados han tenido, obligan a pensar que, si no hay un golpe de timón, estos fondos (si llegan y se gestionan como hasta ahora) más que unos impulsos van a significar un lastre que tendrán que soportar las generaciones venideras. Terminarán malgastados en proyectos que no aportan valor en el largo plazo como lo haría la industria.

 

Hace falta reaccionar y hay que hacerlo ya, sin demora, sin parálisis por el análisis, sin miedo a impulsar proyectos, aunque un porcentaje de los mismos pueda ser fallido: forma parte del riesgo empresarial y debe estar en el ADN de la colaboración público-privada.

 

El pasado 9 de marzo, MÁS INDUSTRIA visita el Parlamento de Andalucía para reunirse con representantes del partido VOX.

Mienbros de MÁS INDUSTRIA han visitado el parlamento de Andalucía donde se han reunido con representantes del partido VOX: D. Rafael Segovia y D. Juan José Bosquet ( portavoz en la comisión de política industrial y energía) . En el transcurso de la reunión, los representantes de MÁS INDUSTRIA, Aurelio Azaña (Presidente) y Rafael Baena ( vocal) hicieron hincapié en las necesidad de una política industrial activa encaminada a aumentar el PIB industrial de la región como vía para conseguir la disminución del paro con empleos estables y de calidad.

Se abre una vía de colaboración donde MÁS INDUSTRIA puede aportar su “saber hacer” en materia de industria para conseguir esos objetivos.

MÁS INDUSTRIA ADVIERTE DE QUE LOS PLAZOS PARA LAS AUTORIZACIONES ADMINISTRATIVAS SE PUEDEN DISPARAR

Esa es la conclusión de un análisis sobre el terreno hecho por MAS INDUSTRIA que revela que los plazos para las resoluciones de autorizaciones/ denegaciones administrativas de nuevas industrias pueden alargarse hasta los dos años. Estos plazos también aplican cuando se trata de modificaciones sustanciales de industrias ya existentes que requieren de una nueva autorización ambiental integrada.

La autorización ambiental integrada es la figura ambiental derivada de la ley de gestión integrada de la calidad ambiental de Andalucía para industrias potencialmente contaminantes de las recogidas en el anexo 1 de dicha Ley.

Pese al decreto de simplificación administrativa ( que redujo por ley los plazos administrativos para todas estas actividades) el “ tapón” sigue existiendo debido fundamentalmente a la parálisis de la administración; la falta de funcionarios cualificados que puedan analizar sin temor los proyectos que se presentan ( no es lo mismo un proyecto de un parque fotovoltaico que de una industria de procesos); a la maraña de informes administrativos vinculantes de múltiples consejerías que tienen que evacuarse para cualquier autorización y a la parálisis por el análisis que sigue imperando en los trámites administrativos.

Y es que, aunque la ley marque unos plazos, en la mayoría de los procedimientos para la legalización de industrias predomina el silencio administrativo negativo, por lo que es mejor esperar a que contesten y pedir que contesten porque si no se podría considerar como que la actividad está denegada. Otra forma de aumentar artificialmente los plazos es pedir requerimientos de subsanación cuando éstos están próximos a cumplir, lo que pone otra vez el contador a cero.

A pesar del decreto de simplificación, a pesar de la declaración de proyectos estratégicos, a pesar de los “Project manager” puestos por la administración para hacer el seguimiento de proyectos, el tapón sigue existiendo.

Los mayores plazos están, como siempre, en la Consejería de medio ambiente, seguido por la Consejería de cultura y posteriormente Urbanismo. También la Consejería de salud tiene que emitir informes vinculantes que en determinadas ocasiones pueden demorarse. Sin olvidar a los Ayuntamientos que deben dar un informe de compatibilidad de los terrenos antes de iniciar el trámite ambiental de este tipo de actividades industriales lo que, en función de la complejidad del ayuntamiento en cuestión, puede tardar más o menos tiempo.

Paradójicamente, es la Consejería de políticas industriales la que menos tarda en dar esas autorizaciones, sobre todo cuando se trata de aplicar los reglamentos de seguridad industrial a través del tramitador digital (conocido como PUES) ya que se hace mediante declaraciones responsables que no interrumpen los plazos y que la administración competente comprueba a posteriori.

Todo ello, está haciendo que muchas inversiones industriales (que podrían ubicarse perfectamente en Andalucía como primera opción)   se están yendo a comunidades autónomas limítrofes como Extremadura ( cuya administración pública está haciendo un esfuerzo de acompañamiento y de apoyo de todo tipo a este tipo de proyectos ) o a nuestro país vecino Portugal ( otro ejemplo de éxito de industrialización en tiempos actuales y que también está apoyando realmente la implantación de industrias en su territorio gracias a una política industrial acertada y ayudas que acompañan a la inversión como ya hemos puesto de manifiesto en múltiples ocasiones desde MAS INDUSTRIA).

Ninguna de las acciones que se han propuesto desde MAS INDUSTRIA parece que hayan tenido calado en la administración actual, como el uso de más declaraciones responsables; el cambio en muchos trámites del sentido del silencio administrativo; el uso de agentes externos ( consultores o empresas especializadas, Colegios profesionales que son corporaciones de derecho público con capacidad para emitir esos informes) para hacer las evaluaciones o los informes; la modificación a fondo de la ley Gica que en su momento fue un buen instrumento pero que está obsoleta o la elaboración de una ley de fomento industrial que contemple todas estas medidas y muchas más que hay que poner en marcha si verdaderamente queremos aumentar el PIB industrial de Andalucía.

Desde MAS INDUSTRIA seguimos sosteniendo que, para disminuir el paro de la región y mejorar la calidad y la estabilidad real del empleo la solución más segura es aumentar el PIB industrial de nuestra región y fijarnos en el ejemplo de comunidades autónomas como País Vasco o Navarra donde han hecho una apuesta decidida por su ecosistema industrial.

Curiosamente, los plazos para autorizaciones administrativas industriales no han experimentado mejorías dignas de elogio ni con el gobierno socialista, ni con el posterior gobierno de coalición ni con el ahora gobierno en solitario del Partido popular lo que nos hace sospechar  o que políticamente no hay interés real ( no solo de boquilla) por la industrialización de Andalucía o que el problema está tan  imbricado que, a pesar de la buena voluntad política, nadie da con la solución al problema.

Para resolver el problema desde el fondo, habría que hacer un cambio tan disruptivo y valiente que, de salir mal, le podría costar muy caro en votos al dirigente que en ese momento esté gobernando la región. Una vez más, se cumple la contundente regla  de que si se aborda un problema de la misma forma que se ha hecho siempre, se llagará siempre al mismo resultado.

Imagen Imagen en Freepik

#EVENTO | Presentación del libro “Cataluña y Quebec. Las mentiras del separatismo” José Cuenca y socio de Más Industria

Nos complace invitaros a la presentación del libro “Cataluña y Quebec. Las mentiras del separatismo” del embajador español José Cuenca y socio de Más Industria. La presentación tendrá lugar el 7 de febrero a las 19:00 horas, en la Real Academia Sevillana de las Buenas Letras.

La presentación del evento correrá a cargo de grandes nombres como D. Pablo Gutiérrez-Albiz Conradi (Excmo. presidente de la Real Academia), D. José Antonio Gómez Marín (miembro numerario de la Real Academia) y D. Ignacio Camacho López de Sagredo (miembro numerario de la Real Academia).

La entrada será gratuita hasta completar el aforo.

Razones para invertir en Andalucía

Razones para invertir en Andalucia Jose Cuenca

José Cuenca, embajador de España habla de las razones por las que invertir en Andalucía. Cuenca destaca la seguridad jurídica, estabilidad política, una economía en expansión y unas razonables perspectivas de rentabilidad de la comunidad andaluza.

INVERTIR EN ANDALUCÍA

ESCRITO POR JOSÉ CUENCA

En la primavera de 1999, fui nombrado embajador en Canadá. Un gran honor. Por entonces, el nacionalismo quebequés había celebrado dos consultas, para decidir sobre la eventual independencia de Quebec. Lo hicieron de conformidad con lo establecido por las normas constitucionales canadienses, que permiten la separación, mediante voto popular, de cualquiera de las diez provincias que hoy componen Canadá. Algo que no existe en nuestra Carta Magna, como bien saben los amigos catalanes.

En el primer referéndum canadiense, celebrado el 20 de mayo de 1980, el “NO” se impuso por 20 puntos; en el segundo, que tuvo lugar quince años después, la ventaja se redujo solo a unas décimas. Cuando me incorporé a mi puesto, la opinión de los colegas rozaba la unanimidad: Canadá se fracturaba. Solo había que esperar a la siguiente consulta, “que tendrá lugar -según aseguró el Primer Ministro de Quebec- cuando se den las condiciones ganadoras”. Hoy, casi 30 años después, ese tercer referéndum no se ha celebrado, ni parece que se vaya a celebrar. Un Canadá fuerte y unido sigue formando parte de la ONU, de la Alianza Atlántica y de todas las Organizaciones internacionales a las que pertenecía. Y el secesionismo quebequés, antaño poderoso, ha entrado en pérdida de velocidad.

No me propongo analizar las razones políticas que explican la crisis de ese sentimiento, que sigue ahí, aunque ya no parece amenazar a la integridad territorial de Canadá. No es ése mi propósito. Voy a referirme solo a la cuestión que me interesa subrayar: el impacto que la incertidumbre suscitada por el separatismo creó en la economía de Quebec. Porque fue devastador. La mañana del segundo referéndum, y ante la posibilidad bastante real de que triunfase el “SI” –luego, como digo, acabó por imponerse el “NO”-, masas de vehículos cruzaron la frontera de los Estados Unidos con un mismo objetivo: cambiar los billetes canadienses por dólares americanos. Se formaron largas colas ante las ventanillas de los bancos que, según cuenta el embajador de ese país en sus memorias, se vieron obligados a cerrar. No había liquidez para hacer frente a la riada de divisas que bajaba desde el Norte. Y es que, de todas las avalanchas conocidas, la más difícil de embridar es la estampida del dinero.

Las mentiras del separatismo

La editorial “Renacimiento” acaba de sacar una nueva versión de mi libro “Las mentiras del separatismo”, donde estudio el demoledor impacto que el proyecto rupturista tuvo en la economía de Quebec. Es lo que deseo destacar. La posibilidad de que se independizara esa provincia ahuyentó a más de 700 empresas, que cerraron sus negocios para instalarse en Ontario, Alberta, Manitoba y la Columbia Británica. Consecuencia: deslocalización de las multinacionales, caída del mercado inmobiliario (cientos de miles emigraron, poniendo en venta sus viviendas), falta de inversiones y fuga de capitales, con el consiguiente cataclismo en la Banca y en la Bolsa de Montreal. No lo he leído en los libros: lo he visto con mis ojos. Y lo cuento con detalle para quien lo quiera comprobar.

Los separatistas catalanes no tomaron nota de lo sucedido en Canadá. Al contrario: pensaron que semejante desbandada jamás sucedería en su Comunidad. Tengo publicada ya la reacción del Muy Honorable Presidente, Artur Mas, (conservo la grabación, por si alguien la desea consultar) afirmando que ni los bancos ni ninguna otra compañía se iría jamás de Cataluña. Luego, tras el golpe fallido de octubre de 2017, pasó lo que pasó. No solo el Sabadell y La Caixa se marcharon, sino que, según el Colegio de Registradores, lo hicieron más de 5500 empresas, con un ritmo que llegó a alcanzar las 250 diarias.

El resultado está sobre la mesa: una Cataluña dividida y arruinada soporta una deuda gigantesca que nadie sabe cómo y cuándo se podrá pagar. Y el dinero ha tomado sus distancias. Según la Secretaría de Estado de Comercio, en el 2017 (año del golpe) y los dos que le siguieron, la inversión extranjera en esa otrora próspera región se redujo en un 21,3%, mientras que en la Comunidad Valenciana o en Madrid, refugio principal de las empresas emigradas, aumentó de manera espectacular.

¿Qué había sucedido? Muy sencillo. Los fondos extranjeros siempre buscan, allí y en todas partes, una sólida base legal (seguridad jurídica), una equilibrada situación política (estabilidad) y un legítimo objetivo económico (rentabilidad). Algo que el Gobierno de la Generalidad, obsesionado por el inquietante, caduco y perturbador “procès”, no podía garantizar. Para dar una imagen positiva, de cara al exterior, contrataron expertos internacionales, con objeto de envolver la cruda realidad en papeles de colores. No dio resultado. La propaganda está muy bien, y hay unas cuantas firmas europeas diestras en articular las fabulaciones más aventuradas. Viven de eso, y cobran importantes cantidades por sus falsos y vistosos oropeles; pero los empresarios, tan poco dados a creerse el cuento de la lechera, conocen los factores que gobiernan el mercado. Y obran movidos por informes serios y profesionales, redactados por expertos que les cuentan la verdad.

Por qué invertir en Andalucía

Eso es lo que hoy ofrece Andalucía: seguridad jurídica, estabilidad política, una economía en expansión y unas razonables perspectivas de rentabilidad.

Andalucía está de moda. Y más que lo va a estar. No voy a insistir en su dinámico despliegue industrial, en su bien desarrollada agricultura, en su magnífica calidad de vida. Todo eso es conocido. Solo quiero enfatizar que, a mi juicio, esa Autonomía reúne las mejores condiciones para convertirse en la región con mayor potencial de desarrollo de toda la Unión Europea. No hace falta ser un experto en geoestrategia para comprender que, a caballo entre dos mares, con un clima bonancible y a un tiro de piedra de todo un Continente con enormes posibilidades, la Comunidad andaluza ofrece las mejores condiciones para la atracción de capitales. Muchos inversores ya lo saben, pero es preciso que lo sepan muchos más. Porque en el mundo interdependiente y globalizado en que vivimos, hay cuantiosos fondos que buscan un destino. Y aquí lo pueden encontrar.

Los que entienden de esto más que yo tienen ante sí un gran desafío: crear mecanismos, ágiles y eficaces, para simplificar trámites inútiles; asignar los recursos necesarios en apoyo de una gran operación de imagen; y ofrecer al inversor los incentivos oportunos, a fin de alentar su aterrizaje en el tejido productivo de esta región privilegiada. Urge ponerse manos a la obra. Hoy contamos con tecnologías avanzadas para dar a conocer lo mucho que aquí pueden encontrar los empresarios. Y hacerles ver algo que ya constituye una fecunda y reconocida realidad: que Andalucía es el futuro.

José Cuenca, Embajador de España

Las 10 claves del NO desarrollo industrial de Andalucía

La industria en Andalucía, antigua fábrica de productos químicos
Desarrollo industrial de Andalucía, antigua fábrica de hierro de Sevilla

NUEVA OPORTUNIDAD (CASI LA ÚLTIMA) PARA EL DESARROLLO INDUSTRIAL DE ANDALUCÍA

ESCRITO POR Aurelio Azaña, presidente de Más Industria

La mayoría absoluta del Gobierno andaluz del Partido Popular está generando buenas alternativas para el desarrollo industrial de Andalucía.

Por delante, cuatro años de estabilidad política durante los cuales se pueden hacer muchas cosas a favor de la industria, y la existencia de una Consejería de Políticas para la Industria abre el camino de una recuperación industrial tantos años abandonada.

Este artículo forma parte de una serie, a lo largo de la cual ofreceré mi visión de lo que ha sido la política actual hasta ahora y lo que puede pasar, o me gustaría que pasara.

Tras más de 30 años dedicado a la industria, abordo estos temas desde la seguridad y confianza que me otorga la experiencia. E intentaré hablar con la valentía, con esa que posee el que nada tiene que perder. En todo caso, argumentaré mis palabras, sabiendo que éstas removerán sentimientos a muchos agentes que han estado implicados en la primera línea de batalla de la política industrial.

Tampoco daré ni nombres, ni datos, más allá de lo estrictamente necesario, porque no serviría de nada. Es mejor mirar al frente y luchar porque podamos ser dueños de nuestro propio futuro y el desarrollo industrial de Andalucía.

Desarrollo industrial de Andalucía, antigua fundición de Sevilla

Capítulo I: Análisis de las legislatura anteriores

La anterior legislatura partía con buenas condiciones para poder realizar reformas en el sector industrial. Si bien es cierto que el PP no estaba solo, la alianza con Ciudadanos presagiaba el cambio esperado.

Empezaron bien, pero conforme avanzaba la legislatura, las expectativas de cambio de la situación industrial de nuestra región, se fueron desinflando hasta perderse.

Un ejemplo fue la misma la Consejería de Hacienda e Industria que, tras la reforma a mitad de legislatura, la palabra industria desapareció del cartel y, lo que es peor, las competencias de industria, energía y minas quedaron separadas. Industria y minas se pasaron a la Consejería de Transformación Económica, regida por Rogelio Velasco y, por otro lado, energía se quedó en la Consejería de Hacienda bajo la dirección del consejero Juan Bravo.

Aún se desconoce el motivo de esta decisión, pero, en mi humilde opinión, prevalecieron los intereses partidistas y de control de tres sectores económicos muy importantes por encima de la eficiencia y eficacia, palabras que en política se conocen poco.

A día de hoy, ninguno de estos hombres fuertes -Velasco y Bravo- de dichas Consejerías se encuentran en la nueva formación de Gobierno. Esto hace pensar en una nueva vía para cambiar las cosas que no han funcionado.

Que quede claro: no fueron malos consejeros, ¡ni mucho menos! Sino que no fueron capaces de llevar los cambios a los niveles que la situación necesitaba, y sigue necesitando el desarrollo industrial de Andalucía.

La no industrialización política, antigua fábrica de fundición de Sevilla

Las 10 claves políticas del NO desarrollo industrial de Andalucía

Todos los consejeros que he tenido la suerte de conocer, estos y los anteriores del PSOE, me han parecido siempre personas muy inteligentes, bien preparadas, con visión… En fin, que podrían haber hecho grandes cosas.

¿Por qué no lo hicieron? A continuación, las razones, según mi humilde opinión, que impidieron el cambio.

1 – Los toros, desde la barrera

En los últimos 20 años, ninguno de los consejeros que hemos tenido en materia industrial han trabajado dentro de la industria. Es decir, no han conocido los problemas desde dentro.

Sólo han visto la cara amable que, durante las visitas, ofrecían sus directivos. Sin embargo, no han tenido que sufrir reconversiones industriales de adaptación al mercado, barreras administrativas o autorizaciones truncadas, ya sea por la falta de algún papel inocuo, ya sea por leyes sumamente restrictivas para evitar que el funcionario firmante no pudiera ser imputado por prevaricación al interpretar dicha ley, reglamento u orden, a favor de una industria.

El no desarrollo industrial de Sevilla, antigua fábrica de vidrio
2 – Parálisis por análisis

La administración pública en Andalucía está literalmente parada. Las autorizaciones no llegan, o lo hace pasados tres años cuando o el proyecto se ha quedado obsoleto, o se ha adelantado la competencia.

El decreto para desregularizar determinados trámites acortar los plazos de las concesiones, no ha servido para nada en el sector industrial. Sólo ha sido un lavado de cara, algo a lo que ya estamos acostumbrados.

Y es que, no son capaces de hacer cosas valientes.

La gran bestia negra legislativa que tiene la industria en Andalucía es la ley Gica, Ley de Gestión Integrada de la Calidad Ambiental. Esta ley ha supuesto una paralización de la actividad económica: por el exceso de celo de la administración; por la penalización y miedo a una incursión de un delito de cárcel por cualquier actividad industrial que supusiese el más mínimo impacto sobre el medio ambiente; por los excesivos plazos que se concedió la administración para contestar los proyectos.

El proyecto del oleoducto

Un ejemplo de esta negligencia administrativa fue la autorización para la construcción de un oleoducto hasta la proyectada refinería de Extremadura. No sé si el proyecto hubiera salido adelante, pero sí que ese proyecto ya tenía un equipo de ingeniería trabajando que iban en serio. Sin embargo, el hecho de no concederle la autorización ambiental para pasar el oleoducto desde el puerto de Huelva hasta la frontera con Extremadura fue, a mi juicio, una de las principales causas de que el proyecto se truncase antes de ver la luz.

Entonces, ningún político apareció para informar que España está sembrada de oleoductos enterrados y que ninguno de ellos ha dado problemas relevantes a lo largo de la historia.

Ese oleoducto, esa refinería, hubiese dado mucho trabajo a Andalucía, región donde tenemos dos refinerías y el saber hacer necesario para arrancar ese emblemático proyecto.

Ejemplo de no desarrollo industrial de Andalucía, antigua fábrica de manufacturas
3 – Falta de valentía política ante las críticas y demasiado “políticamente correcto”

Llevamos 40 años haciendo las cosas de la misma forma, y sólo nos ha llevado a que el PIB manufacturero de Andalucía -no confundirlo con el PIB industrial que es otra cosa-, haya ido cayendo.

¿El problema? Todos, absolutamente todos, le han dado el mismo enfoque: encargar un plan estratégico de la industria, de escaso o nulo presupuesto, para mejorar la situación.

Este plan tiene que ser consensuado por los agentes sociales -sindicatos mayoritarios de dudosa representación actual- y empresariales -fundamentalmente la Confederación de Empresarios de Andalucía con intereses dentro de la organización-.

Sin embargo, este plan obvia el resto del espectro social y sociedad civil y, para cuando los tiene en cuenta, aplica unos modelos de gobernanza convocando a organizaciones sociales que poco o nada entendía de la materia. Eso sí, todos querían poner su granito de arena -he llegado a ver un proceso de gobernanza sobre temas técnicos energéticos intervenciones de la asociación de amas de casa…-

Y luego está el hecho de que detrás de cada proyecto de cierta envergadura siempre aparece la plataforma “anti-proyecto”: gente con tiempo libre que en muchas ocasiones abusan de la manifestación y la manipulación a la gente con buenas intenciones. La expresión “la industria provoca malformaciones en los fetos y salen niños de dos cabezas” la he escuchado varias veces a lo largo de mi, ya extensa, vida profesional.

Ejemplo de no industrialización de Andalucía, antigua fábrica de envases de hojalata
4 – Las cuitas políticas

En bastantes ocasiones, los problemas entre los distintos partidos políticos, viscerales ellos, consignatarios los otros, obedientes y sumisos la mayoría, han impedido llegar a pactos de Gobierno en cosas tan trascendentes para el bienestar de los andaluces como la industria.

Me viene a la cabeza el pacto por la industria promovido por ASIAN, Asociación Superior de la Ingeniería de Andalucía, y 60 instituciones públicas y privadas, entre ellas, las 9 universidades que hay en Andalucía.

Al final, el proyecto fue descafeinado de la carga social que conllevaba la iniciativa, y terminó siendo un pacto entre empresarios y sindicatos con la foto de rigor. Nada cambió, no hubo ningún compromiso. Sólo mucha gente cómoda en ese escenario.

Aun así, más bochornosa son las cuitas entre la política local, la regional y la nacional cuando no coinciden los signos políticos de cada institución.

Recuerdo el proyecto de fondo de barril que la compañía CEPSA quiso promover para garantizar la supervivencia de su refinería de San Roque durante otros 20 años. El proyecto no sólo aseguraba la vida de la propia CEPSA, sino también de muchas empresas relacionadas.

En esta ocasión, los enfrentamientos políticos entre los caudillos de las diversas organizaciones, dio al traste con el proyecto habiendo ya recibido verbalmente el visto bueno. ¡Adiós a una inversión de 1.000 millones de euros!

Claves de no industrialización de Andalucía. Fábrica y bodega de Torreblanca
5 – Falta de iniciativa para atraer proyectos e inversiones industriales extranjeros

De un lado, el mundo está lleno de inversores con cantidades ingentes de dinero para gastar en proyectos viables y sensatos. Del otro, Andalucía tiene todo lo que se necesita tener para ser la California de Europa: el clima, la gente, los profesionales bien preparados, más de 2 millones de metros cuadrados de suelo industrial disponible y un geoposicionamiento estratégico en el estrecho de Gibraltar, por donde pasa la mitad del tráfico marino del mundo.

Aquí, la política tiene mucho que decir y realizar esa labor de marketing corresponde a los políticos que tienen dedicar parte del presupuesto a “vender” la Andalucía industrial por el mundo.

Se terminaron los tiempos en los que la gente venía a comprar un buen producto. Ahora buenos productos hay en todas partes y hay que salir a buscar los clientes. No puedes permanecer en tu despacho esperando que te compren.

Hay que competir para atraer inversiones, y hay que tener humildad para dejar los confortables despachos de la administración y salir a vender con el único objetivo del desarrollo industrial de Andalucía.

Claves del no desarrollo de Andalucía. Antigua fábrica de corchos
6 – El fatídico caso de los EREs

El caso de los ERE´s ha hecho mucho daño al desarrollo de proyectos en Andalucía.

Sin entrar en consideraciones políticas -de las que ni entiendo, ni quiero opinar-, lo que hemos visto en la prensa sobre la condena de José Antonio Griñán, es solo la punta del iceberg. Me explico.

Al igual que con el expresidente de la Junta, que ha quedado demostrado que no se enriqueció con este caso, otros muchos colaboradores suyos de menor rango fueron condenados a penas de cárcel, inhabilitación o multas, para luego ser exonerados.

A parte de los años de angustia, noches sin dormir, pérdidas de salud y costes en abogados y procuradores, estas personas están arruinadas profesionalmente, mentalmente, moralmente y económicamente.

Seguramente firmaron un papel sin conocer que por detrás había una serie de sinvergüenzas tramando una estafa. Fueron los “tontos” útiles que tuvieron la mala fortuna de tener que firmar un papel, hacer una transferencia de fondos por orden o algo parecido.

Ello ha provocado consecuencias catastróficas. Desde entonces, la Administración y las empresas públicas adjuntas están paralizadas por miedo a firmar autorizaciones, subvenciones, ayudas, transferencias o cualquier otra cosa que genere unos derechos en los administrados.

Las consecuencias del miedo a firmar

Así pues, el miedo a la acusación por prevaricación está metido en casi todos los servidores públicos de Andalucía, provocando la paralización de la institución y la región.

Actualmente, las autorizaciones tardan varios años en resolverse. La resolución de ayudas públicas tarda una media de tres años, más tres años hasta que se libera. Las mesas de los funcionarios están llenas de papeles, informes y documentos que son escudriñados concienzudamente para mayor gloria de la perfección del expediente.

Todo está parado, y todo seguirá parado si no se cambia la legislación y se utiliza otro modelo para ser más ágil.

A golpe de decreto no se conseguirá gran cosa si incluye no un cambio de modelo que empodere menos el funcionamiento de la Administración y cuente con recursos externos para tramitar expedientes con asunción de la responsabilidad por parte de estos.

Seamos conscientes de que las leyes dejan siempre muchos resquicios, dudas y lagunas para las que la función pública no está preparada o legitimada para interpretar. Los que interpretan las leyes son los jueces, e incluso éstos no se ponen de acuerdo.

Todo ello genera sólo genera incertidumbre en el administrador y en el administrado. Como consecuencia, la realidad es que es más fácil que salga un informe negativo desde la Administración -que le compromete menos- que positivo, y eso cuando sale.

Antigua explotación ganadera y fábrica de pasteurización y productos lácteos
7 – Lo urgente y lo importante. La masa de gelatina

Lamentablemente, los altos cargos de la Administración son personas que se pasan la mayor parte del tiempo apagando fuegos, lo urgente, pero que no pueden dedicar ni un minuto a elaborar y consensuar estrategias para -en el caso que nos ocupa- desarrollar industrialmente Andalucía, lo importante.

La maquinaria administrativa que se ha creado es tan robusta, ingente voluminosa y está tan perfectamente engranada que estas personas tienen que dedicar su tiempo a echar aceite a los engranajes para que ruede y no se quede del todo parado.

De esta manera, no tienen tiempo para quitar engranajes que no aportan valor y conducir el coche en la dirección adecuada para llegar a la meta al final de la legislatura.

La masa de gelatina contra el desarrollo industrial de Andalucía

Un buen amigo que fue secretario general de la Junta me lo explicó muy bien con el símil de la gelatina:

“Estos altos cargos, sobre todo los que vienen del mundo empresarial para intentar mejorar desde lo público la sociedad, se dedican a empujar una inmensa masa de gelatina. La gelatina está tan pegada al suelo para no cambiar su estatus, su posición, que para cuando se quieren dar cuenta, ya no empujan, han sido engullidos. Y en ese mismo momento pierden su razón de ser, ya que han dejado de aporta valor al proyecto, independientemente de las buenas intenciones”.

Antigua almacén de aceite en Sevilla
8 – Las ayudas públicas

Otra cuestión aparte es cómo se han gestionado las ayudas públicas para la inversión e innovación de proyectos, autónomos y empresas.

En todos estos años, ha llegado mucho dinero, ingentes cantidades de dinero, con el objetivo de fomentar el desarrollo de Andalucía. Sin embargo, una parte importante ha sido devuelta por la ineficacia en la gestión y la incapacidad para que llegase a las personas adecuadas movilizasen inversiones y creasen puestos de trabajo de calidad.

Por cada euro invertido por la Administración Pública se podrían haber movilizado entre cuatro y diez euros de inversores, que luego sería recuperado ese dinero en forma de impuestos derivados de la actividad económica generada.

Frente a eso, las convocatorias de subvenciones a la inversión y a I+D+i gestionadas por distintas Consejerías y Agencias públicas dependientes de la Junta -en especial la Agencia IDEA-, que tardan una media de dos años y medio a tres años en sacar convocatorias y otros tantos años en resolverlas.

Como resultado, la pérdida de credibilidad de dichos procesos entre los administrados (empresas y autónomos). Esto provoca que en la mayoría de los casos termine sobrando dinero de las dotaciones presupuestarias por las escasas convocatorias que se publican.

Requerimientos imposibles, ineficiencia administrativa

A todo esto hay que añadir que, como las órdenes que regulan esos incentivos son tan farragosas y difíciles de cumplir, es muy probable que en el transcurso de la ejecución del proceso, los beneficiarios de dichas ayudas pierdan su condición de beneficiario y tengan que renunciar a la ayuda o devolver el dinero en el caso de que les haya pillado a mitad del proceso.

La mayor parte de ese dinero hay que devolverlo con los consiguientes perjuicios, intereses y sin renunciar a mantener la maquinaria administrativa capaz de devorar todos los recursos a su alcance, con el único objetivo de mantenerse viva sin tener una actividad que justifique su existencia y aporte de valor.

Es más fácil acceder a proyectos y ayudas directamente de la Unión Europea, que conseguir que la Administración regional apoye un proyecto de inversión y de innovación.

Antiguo almacén de drogas y productos farmacéuticos en Sevilla
9 – Nuestros vecinos

Mientras Andalucía se encuentra esa parálisis por análisis nuestros vecinos más próximos están ya haciendo las cosas de otra manera.

Por un lado, tenemos a nuestro país vecino, Francia, que está apoyando las inversiones con dinero público, dando facilidades, financiación y aplicando fondos a la par que se van ejecutando. Así mismo, está apoyando fuertemente los buenos proyectos generadores de riqueza, siendo ágiles y, en definitiva, poniéndose del lado del industrial, del empresario, del emprendedor. Se han convertido en un aliado.

Por otro lado, está Extremadura: apoyando inversiones, ayudando a desbloquear los problemas administrativos, acompañándolos al Ministerio o a la Unión europea para conseguir financiación… U otorgando cartas de apoyo a proyectos industriales firmadas por el mismísimo presidente de la Junta de Extremadura para proyectos importantes, proyecto que tendrían que haber venido a Andalucía pero que no tuvieron el apoyo por escrito ni de un director general y mucho menos del presidente de la Junta.

De hecho, hay bastantes proyectos que estaba previsto que aterrizasen en Andalucía pero que, por falta de apoyo, ambición y/o visión, nos los han “birlado” en nuestras narices.

Por todo ello, para mí, estas dos regiones son modelo de cómo hay que hacer las cosas para industrializar el entorno.

La industria en Andalucía, antigua fábrica de productos químicos
10 – El principio de Einstein

Einstein es famoso por formular la teoría de la relatividad, de acuerdo.

También sostuvo que la voluntad humana es capaz de mover más que la energía atómica, de acuerdo también.

Pero también se le atribuye la frase de que “si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”. O lo que viene a ser, que, si se hacen las cosas igual que siempre, se llegará a los resultados de siempre.

Esto lo he podido comprobar a lo largo de mi vida profesional. Si la Administración, si el nuevo Gobierno salido de las urnas por mayoría absoluta en Andalucía no hace cambios drásticos, disruptivos y valientes en el modelo productivo y de política industrial, al final se llegará a lo mismo que tenemos ahora: un PIB industrial y manufacturero cayendo. Tampoco conseguiremos generar empleos de calidad y tendremos otra generación de jóvenes bien preparados a todos los niveles que tendrán que irse de Andalucía en busca de un futuro mejor.

Y esa es la gran incógnita. Saber si tendremos un Gobierno valiente, capaz de coger el toro por los cuernos y afrontar los cambios necesarios para solventar los problemas que   he querido denunciar en párrafos anteriores o, por el contrario, se dejará engullir por la masa de gelatina y perder esos cuatro años cruciales para el futuro de Andalucía.

 

En la segunda entrega daré las claves para afrontar los retos que tenemos por delante en materia de desarrollo industrial.